Helado: rico antojo
Esta casí por llegar el calor y con él el antojo de saborear un rico helado. Un postre que aunque se desconoce su origen, se sabe que es muy antiguo, el cual sólo era probado por reyes y personas privilegiadas, actualmente es irresistible, sobre todo en veranoEl helado es un rico antojo para disfrutar en épocas de calor. (Foto: Archivo )
La sensación fría al probar un rico sorbete helado, es lo que todos buscan en la temporada de calor. El simple hecho de imaginarlo hace agua la boca. Esa delicia a partir de leche batida congelada, endulzada y concentrada, elaborado de diversas formas, colores es un regocijo para todo aquel que lo prueba.
De fresa, nuez, piñón, chocolate, limón, tamarindo, zarzamora, vainilla, guanábana, mango, entre otros, el helado es una forma sana y refrescante de saborear un rico postre para mitigar el calor.
Un postre helado que hasta hace miles de años, sólo podían disfrutar muy pocos. Actualmente, es un privilegio que todos tienen a la mano.
Investigaciones realizadas por El Fomento de Nutrición y Salud a.C., dicen que aunque no se conoce mucho sobre la historia del helado, se ha encontrado información que permite deducir que su origen es muy antiguo. Por ejemplo, los chinos muchos siglos antes de Jesucristo, ya mezclaban la nieve de las montañas con miel y frutas.
"Los Califas de Bagdad, mezclaron con la nieve zumos de frutas y le dieron el nombre de Sharbets, que significaba bebida y de donde procede el nombre de Sorbete empleado hoy en día.
"Hipócrates (460-377a.C.) recomendaba a sus pacientes los denominados Congelados (nieve con leche o jugos de frutas) ya que según él mismo, activaban los humores corporales y acrecentaban el bienestar", se explica en los cuadernos de nutrición.
Edmundo Escamilla, investigador gastronómico, agrega, que Alejandro Magno daba a sus oficiales nieve dulce, mezcla de nieve, vino o leche y jugo de frutas con miel. Más tarde el helado tomó su lugar como un postre refinado en los fastuosos banquetes del imperio Romano.
"Se sabe que fue Nerón, quién reinó desde el 54 al 58 d.C. quien consumía dichos postres con la nieve traída de las montañas Albanas por sus esclavos. En Roma a través del tiempo, trataban de mantener durante los 365 días del año nieve y hielo en sótanos construidos especialmente para estos. De manera misteriosa el helado no se siguió elaborando en Italia, sin razón alguna", comenta Escamilla.
Crónicas históricas, mencionan que en América, el helado, también, se hacia presente cuando Moctezuma II, emperador de los Aztecas a la llegada de los españoles hacia llegar a su mesa nieve proveniente del Popocatepetl.
Durante mucho tiempo era muy difícil producir helado, pero su potencial gastronómico era tal que sólo los reyes y personas privilegiadas tenían la fortuna de saborearlo. La historia cuenta que cuando Catalina de Médicis contrajo matrimonio en 1533 en Florencia con el que habría de ser Enrique II, se sirvieron como postre en la ceremonia nupcial, helado de frambuesa, naranja y limón.
Hacia 1700, los helados cruzaron el Atlántico y se introdujeron en el Continente Americano. El término ice crem (helado) se encontró en la gaceta de Nueva cork en 1777.
El gran éxito del helado hizo que los científicos como Fahrenheit, Faraday y Reamur, contribuyeron en sus descubrieron la manera de brindar mejores texturas y la mayor producción de helados. Las combinaciones químicas habían permitido lograr temperaturas bajísimas. La meta inmediata era lograr evitar el endurecimiento de la nieve.
Fue así, como el científico Gilliers, invento la heladera, que incluso sigue manejándose en la fabricación artesanal del helado.
Actualmente todos aquellos que gustan de un buen postre frío, no pueden evitar saborear el afamado helado a elegir diferentes sabores.
mjgj