El "bipedestador" es la primera silla en el mundo que permite rehabilitar y poner de pie a personas discapacitadas temporal o permanente, con lo cual pueden ejercitar su sistema gastrointestinal, urinario, cardiovascular y óseo, atenuar las afecciones de ese tipo por la postura que mantienen los pacientes y hacer flexibles los tendones y músculos atrofiados, además de que permite la reintegración al ámbito laboral y social.

Ismael Salazar Lledias es el ingeniero mecánico del Instituto Politécnico Nacional (IPN) quien desarrolló esta silla cuyo peso es de tan sólo 26 kilogramos y es ajustable, por lo que la pueden utilizar los pacientes desde los cinco años de edad y personas adultas con estatura de hasta 1.90 metros y peso corporal de 120 kilogramos.

"El ´bipedestador´ tiene integrados dos sistemas de apoyo: un chaleco de seguridad, similar a los salvavidas, el cual el usuario se coloca en el momento de sentarse, así como un soporte que bloquea las rodillas entre el asiento y la parte frontal de la silla, que evitan el movimiento del paciente y el riesgo de sufrir alguna caída", aseguró.

Salazar Lledias indicó que este desarrollo tecnológico funciona mediante un motoactuador de 24 voltios de corriente directa con batería recargable.

Refirió que el movimiento del asiento se acciona con un control remoto digital, que tiene dos botones de operación, uno para subir y otro para descender. De ese modo la persona ejercita las piernas mediante la realización de sentadillas y puede quedarse de pie el tiempo que desee o ejercitarse.

Mencionó que la silla especial para discapacitados tiene integrado en la parte delantera un soporte de acrílico que sostiene pesos hasta de 60 kilogramos.

"Fue diseñada especialmente para que los usuarios tengan la posibilidad de integrarse al mundo laboral; en el soporte pueden colocar todas las herramientas necesarias para realizar diversas actividades, e inclusive se puede adaptar para sostener maquinaria portátil", afirmó.

Salazar Lledias comentó que como resultado de ese proyecto y para poner al alcance de las personas discapacitadas esta tecnología, creó la micro Empresa Salle Manufacturas y Servicios, con el apoyo del Centro Incubador de Empresas de Base Tecnológica (CIEBT) del IPN.

Exhortó a los egresados del IPN para que se acerquen al Centro Incubador, ya que ofrece orientación legal, de procesos productivos, diseño integral y finanzas, a los emprendedores que tengan la inquietud de establecer un negocio propio basado en el conocimiento adquirido a lo largo de su carrera.

El especialista del IPN informó que la patente del desarrollo tecnológico está en trámite y actualmente elabora los manuales de uso y de mantenimiento. "El equipo se pondrá a la venta en los próximos días y tendrá una garantía de un año libre de mantenimiento".

A partir del primer año de uso la empresa dará servicio de mantenimiento cada seis meses, para tenerlo en óptimas condiciones el bipedestador por lo menos durante una década. Si en algún momento se requieren refacciones o composturas, los usuarios podrán acudir a la empresa para recibir atención.

Informó que a la empresa se prevé la incorporación de por lo menos diez personas que presentan algún tipo de discapacidad, y que lo harán en el área administrativa, de mano de obra y ventas del producto de rehabilitación multifuncional.

Al conocer la silla y cómo opera ésta, la oficina del Consejo de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos le expresó su interés de adquirir 50 "bipedestadores" para donarlos a personas de escasos recursos que los requieran.