La escritora chilena Isabel Allende ha cumplido ya setenta a�os y, para celebrarlo, ha reunido en una antolog�a sus mejores textos de amor. A su edad, asegura, el erotismo "sigue siendo una fuente de enorme alegr�a" y mantiene intactas sus ganas de luchar por aquello en lo que cree.

"Seguir� en las trincheras hasta que me muera, �y a mucha honra!", afirma Allende en una entrevista en la que habla de su nuevo libro, Amor; del feminismo que ha defendido desde ni�a, "antes de que el t�rmino feminista llegara a Chile", y de c�mo la escritura le ha servido para "despejar las dudas, las sombras de la existencia" y para aprender a "conocer mejor" su propia alma.

Publicado por Plaza & Jan�s, el libro se acaba de poner a la venta en Espa�a y llegar� a Latinoam�rica en las pr�ximas semanas. Recopila las mejores escenas de amor de las novelas y cuentos de Allende, seleccionadas por ella misma.

La idea parti� de su editor alem�n y en seguida ella se entusiasm� con el proyecto. No le cost� realizar la selecci�n, porque le encanta "escribir las escenas de amor" y las pudo "encontrar r�pidamente sin tener que leer cada libro".

Para algunos de esos fragmentos, la escritora se inspir� a veces en sus propias experiencias amorosas o en las de conocidos, aunque "recicladas" para la ocasi�n.

"He pasado mi vida enamorada, no me acuerdo de una etapa en que no lo estuviera, de manera que el amor se me da f�cil en la literatura", dice en California, desde donde responde las preguntas de la entrevista.

"El sexo es otra cosa. He tenido encuentros estupendos con algunos hombres -soy heterosexual- pero no tan estupendos como los que suceden en mi cabeza. Confieso que soy una criatura sexual incluso a mi edad, y que si no hubiera optado por la monogamia, andar�a con una red cazando incautos para hacer travesuras con ellos. Por suerte tengo la escritura, donde puedo vivir a trav�s de mis personajes todas las aventuras que en la vida real ya no tendr�", cuenta con humor.

En el pr�logo del libro, la autora de La casa de los esp�ritus rememora su descubrimiento de la sexualidad cuando era ni�a y algunas de las experiencias amorosas que ha tenido en su vida. Y lo cuenta con excelente humor, el mismo que salpica las introducciones de cada cap�tulo. "El mejor afrodis�aco es la risa", subraya.

El lector se enterar� as� de la traum�tica confesi�n que Allende hizo a los siete a�os antes de recibir la primera comuni�n. El cura le pregunt� si se tocaba "el cuerpo con las manos" y ella respondi� que "todos los d�as".

"�Esa es una ofensa grav�sima a los ojos de Dios, la pureza es la mayor virtud de una ni�a!", dijo el sacerdote ante una asustada Isabel Allende que no pod�a imaginar c�mo iba a lavarse la cara o cepillarse los dientes sin tocarse el cuerpo con las manos. "Ese traum�tico episodio" le sirvi� a�os m�s tarde para una escena de Eva Luna. "Nada se pierde, todo se puede reciclar en la literatura".

A los 33 a�os, casada ya con Miguel Fr�as, su primer marido y padre de sus hijos Paula y Nicol�s, Allende descubri� que era "una criatura sensual". Se divorci� de �l en 1987 y unos meses despu�s conoci� al que ser�a su segundo marido, William Gordon, un abogado estadounidense.

"Estoy casada con mi amante y mi mejor amigo, llevamos 25 a�os juntos, nos conocemos, nos ayudamos, nos perdonamos. Sin Willie, francamente no s� c�mo me las arreglar�a en materia de erotismo", subraya la autora de Afrodita.

Galardonada en Chile con el Premio Nacional de Literatura 2010, y en 2012, en Dinamarca, con el Hans Christian Andersen, Allende afirma que con la sexualidad, hoy en d�a, "se exagera cada vez m�s".

"En tiempos de mi abuelo bastaba vislumbrar la pantorrilla de una mujer al subirse al coche para provocar estertores de pasi�n. Hoy no queda nada a la imaginaci�n, no hay ning�n misterio. Eso le quita sabor a la sexualidad, pero es mucho mejor as�, al menos para las mujeres, porque �c�mo ser� vivir entre fundamentalistas!".

Si hay algo que Allende ha defendido a lo largo de su vida es el feminismo, que en su caso comenz� "a los cinco a�os", seg�n le cuenta su madre: "Fui rebelde siempre y desde muy temprano esa rebeld�a fue contra la autoridad masculina: abuelo, padrastro, curas, m�dicos, polic�a, etc".

La escritora confiaba en que Barack Obama saliera reelegido como presidente de Estados Unidos, y as� ha sido. "Creo que ha hecho una buena gesti�n y que pasar� a la historia como un gran presidente. Lo m�s interesante es que al elegir a un presidente negro, algo fundamental cambi� en este pa�s, marcado por el racismo".

sc